jueves, 20 de octubre de 2011

Rosetta

Rosetta / Francia - Bélgica / 1999, 92 minutos.
Dirección: Jean-Pierre Dardenne, Luc Dardenne. Con Emile Dequenne y Fabrizio Rongione.

4 comentarios:

  1. Esta película me transmitió una sensación peculiar:agotamiento. Rosetta vive agotada de tanto luchar, todo lo hace corriendo y con furia, y la cámara refleja permanentemente esa angustia traducida en su movimiento continuo.Nos aproximames a su imagen desde todos los ángulos...y nunca podemos alcanzarla, porque va demasiado rápido, contemplamos su apuro con el deseo de detenerla..ese era mi deseo en toda la película. La joven no descansa ni cuando descansa, ella está presente siempre ahí, en la pantalla, y creo que no nos desprendemos de su imagen ni por un minuto.

    Me preguntaba..¿hasta dónde?, ¿cuándo se detendrá?, o..¿cuál será el próximo intento? Salvar a su madre, enfrentarse con el vecino, acarrear una garrafa, batallar con las frustraciones del trabajo perdido...pelear continuamente contra la injusticia. Pelear con la vida.

    La escena en la que su amigo casi se ahoga y ella lo mira impávida, me sugirió que ese "pelear por la vida", podía tener un final. ¿Acaso no ayudar a su amigo, permitiendo que muriese ahogado, no es una forma de anticipación o de respuesta a su propia tragedia? ¿Veía Rosetta allí, en ese acto final la solución a tanto cansancio? Creo que con sus últimas fuerzas, hasta se permite codearse con la muerte como una alternativa posible. Si bien no su propia muerte, la muerte al fin..como un simple detenerse. Rosetta observa la posibilidad de detenerse alguna vez. Si ella es capaz de hacerlo...alguien lo haría por ella?

    Una mirada menos profunda, podría llevarnos a pensar que sólo quería eliminar a un rival laboral...pero su comportamiento no es tan lineal. Pienso que quería probar si toleraba la idea y la acción de morir, como otra alternativa de lucha. Quizás la última. Pero no... allí sigue ella enfrentándose a la vida...una tarea mucho más ardua. Y sigue luchando, y nos continúa agotando, moviéndose, esquivando la moto de su amigo como esquiva todas las tormentas de su vida...mirando hacia adelante.

    El final, sugiere que terminó por un tiempo su lucha. Creo que todos sospechamos, que es solo un descanso.


    Adriana.

    ResponderEliminar
  2. Buscando otra cosa, di con una nota del crítico Roger Koza sobre el libro de Clément Rosset Reflexiones sobre cine que en un momento se refería a Rosetta y como me gusto se me ocurrió compartirla con ustedes: “En tres páginas gloriosas, Rosset propone una taxonomía (y una hermenéutica) de las lágrimas en el cine. Lloramos de risa, felicidad y tristeza. Pero existe una cuarta expresión del llanto que comporta una emoción de otro orden y una verificación del triunfo de lo viviente sobre la entropía. Dice Rosset: ‘Me emociono en el cine cada vez que hay una victoria de la energía vital sobre los potentes contrapoderes que se le oponen’. Quienes hayan visto el último plano de Rosseta podrán saber rápidamente de qué habla Rosset.”
    Ciudad X. Feb. 2011. Pág. 30.

    ResponderEliminar
  3. La pelicula me encantó. Esta vez pude ver con claridad el recurso del director de enfocar de cerca y continuadamente a Rosetta, como una forma de narrar una historia de vida, o historia minima, que capta toda nuestra atención: la bronca de rosetta.

    El enojo de Rosetta con la vida y su afán de enfrentarla con moralidad la sitúa en una soledad en todos los planos de su existencia: soledad en el barrio, soledad en el trabajo, soledad de amores, soledad de afecto materno y de vinculos familiares. Toda ella dedicada a sostener a su madre y tratar de salvarla, aun a pesar del mal físico o la enfermedad -ese dolor de estomago-

    La ruptura con el amigo, el unico amigo, a causa de la denuncia, es consecuencia del enojo con el sistema injusto que sostiene el trabajo de alguien que roba al patron. La moral de Rosetta ahi me impresiona porque tendemos a sentir que la adversidad y el dolor legitima la corrupción, o que la provocan.

    y al final, es genial la descarga de toda su angustia cuando, luego del frustrado intento de ponerle fin a esa historia interminable, en la pelea final con el amigo sale, o parce salir del circulo que la encierra... o quiero pensar que el final es de un reencuentro con el amigo.
    Hay un perdon? y en ese perdón de él hay un lavado de la culpa?

    Me gustó pensar en esa cuestion, las culpas frente a los seres queridos, a los que supuestamente debemos cuidar, protejer, hasta donde suele producir un olvido de nosotros mismos, olvido que se consume nuestras energias y un dia llega a reclamar todo... es el momento para mirarnos y encontrarnos a nosotros mismos, con nuestros deseos propios. Cerrar con el deber parece que es la apertura al ser uno mismo.

    La almohada

    ResponderEliminar
  4. Bien transmitidas las desventuras de esa pobre adolescente buscando trabajo, que tiene casi todo en contra, empezando por una madre drogadicta y borracha, pasando por un ambiente hostil y terminando con una escasa educación; todo lo que lógicamente le dificulta encontrar una ocupación permanente, para lo que hace falta alguna clase de preparación laboral.

    Digo que me parecen bien transmitidas al espectador esas andanzas, pues esos largos planos-secuencia siguiendo implacablemente la nuca de la protagonista, logran abrumarnos junto con el ambiente opresivo y sin salida en que se mueve la historia.

    La que nos describe al personaje central con deseos de superación pero con valores morales muy discutibles, dispuesta a traicionar a la única persona que la ayudó desinteresadamente.

    El relato va in crescendo, hasta que al parecer, la niña no encuentra otra salida que su suicidio junto a su madre en la pobre casilla en que viven (sugerido por su renuncia al trabajo sin razón alguna, su empeño en tapar todas las hendijas, en arrastrar adentro a su madre, en tenderse en la cama en pleno día, etc.); pero con tan mala suerte que “ni el tiro del final le va a salir”, como dice el popular tango.

    Pues ocurre que la garrafa que debía asfixiarla no tiene gas, por lo que debe emprender una larga caminata de ida y vuelta para terminar sus planes.

    Punto en que el director decidió interrumpir el regreso de la protagonista detenida por el amigo traicionado; terminando allí la película con un final abierto que no nos dice si volverá a su casilla buscando el suicidio o si seguirá su amistad con el muchacho retornando a su pelea con la vida.

    En resumen, me pareció una buena obra, con un argumento lleno de contenido.



    OMAR LÓPEZ DE ALDA

    ResponderEliminar